Esa Mujer

Hoy me habló la Mujer de mágicos reinos escondidos bajo la piel de los seres humanos.
Del valor de ensanchar los pulmones y respirar a fondo las diminutas riquezas que la vida deja al borde de cada segundo.
Del calor de los corazones cuando hacen lumbre para calentar la indiferencia de algunos rincones del día…
Y esa Mujer, ante todo, me transmitió la bendita sensación del espíritu que intenta recorrer, en paz, cada metro y cada paso en su afirmación por la vida, sembrando pequeñas estrellas en el camino; algunas tan diminutas que apenas se ven, pero alumbran, sobre todo cuando más necesarias son, en la oscuridad de la noche…

Publicado por

Angela Castillo

Aprendiza de Poeta Maga