Historia de un caballo

Me contaron hace poco sobre la feliz recuperación que el magnífico ejercicio de escribir ejerció sobre un loco internado muchos años en un manicomio.
Un día se acerca nuestro amigo al despacho del director para informarle que, en su opinión, se percibe a sí mismo completamente cuerdo, después de haber tomado la sabia decisión de escribir un libro.
El director, interesado y atento, le pregunta por el título del libro, a lo cual el loco responde: “Historia de un caballo”
El director le anima a escribirlo, pidiéndole que, una vez terminado, vuelvan a encontrarse.
Seis meses más tarde, el loco vuelve al despacho del director para comunicarle que ya está terminado el libro y se puede proceder a su lectura.
El director, complacido, ve caer sobre la mesa un manuscrito de 587 páginas. Toma el tocho en sus manos y comienza a leer.
Título: Historia de un caballo
Autor: Un loco cualquiera (felizmente curado)
Prólogo: Más rápido que el viento
Primera página: tracatrá
Segunda página: tracatrá tracatrá.
Tercera página: tracatrá tracatrá tracatrá
Cuarta página: tracatrá tracatrá tracatrá tracatrá
Así, hasta llegar a la penúltima página del gran volumen. Pero, antes de pasar a la página 587, el director mira fijamente a los ojos del loco y le pregunta: “¿Cómo termina esta historia?”
A lo cual, felizmente curado, responde el autor: “Sooooooooo”

Publicado por

Angela Castillo

Aprendiza de Poeta Maga