Aire

Todos tenemos un tirano dentro que nos aprieta en su delirante grandeza.
Yo he pedido que me deje ser chiquita, invisible e incorpórea como el aire, ligera como la brisa que se desliza por la piel, columpiándose en el vello de punta.
Y ser también impetuosa como el vendaval que zarandea las ramas del pensamiento, dejando caer el dulzor de sus frutas.
En definitiva, he pedido en mí misma ser aliento que impulse a tocar esa Realidad que me sueña sin medida.

Mientras la imaginación nos pertenezca, haremos de lo imposible un salto hacia la Belleza

Publicado por

Angela Castillo

Aprendiza de Poeta Maga