Confianza

¿Te acuerdas? Fuimos aprendices mientras trazábamos el plano de encuentros y recorridos para encontrarnos.
Leímos en la biblioteca de los libros vivos, buscando historias en unas estanterías y en otras, con la única misión de no quedarnos dormidos en las páginas ya escritas, sino despiertos en cada renglón que trazase nuestra conciencia.
Nos acompañaba la confianza de despertarnos cuando quedásemos dormidos, o atrapados en un cuento de laberintos.
Pero la confianza no basta sin la voluntad de ser confiables.
Tus brazos dormidos, no alcanzan a alcanzarme.
Y, sin embargo, en algún horizonte de nuestro sueño común, me alcanza el amanecer de tu voz:
«Lo siento, me quedé atrapado en otro cuento.
Perdóname. No he despertado con la humedad de tus lágrimas ni con el fuego de tu rabia.
No he despertado hasta que no has gritado tu último grito, el que por fin ha liberado todo el dolor de tus entrañas y ha retumbado en esta página vacía donde no hay leña para encender más iras, ni agua para regar más desilusiones…»
Leímos como aprendices en los párrafos de la vida.
Despertemos ahora, y cumplamos con la única misión de activar las líneas de conciencia…

Ilusiones

En el recorrido que hace la ilusión, ya no puedo acordarme de las veces y tramos que la desilusión anduvo los pasos. Desaparece a menudo la ilusión y, sin embargo, sigue latiendo su pulso, su capacidad de generar el entusiasmo y la fuerza que impulsan un nuevo comienzo. Y es que permanece la confianza latente en que, por debajo o por encima de todas las cosas que han sucedido, hay un ser en mí que siempre está naciendo, aunque no siempre encuentre acogida en estos brazos que sujetan y se apegan al ser que fui.
Esta ilusión de la que hablo, no es una ceguera rosa que pinta el camino del mismo color porque desconoce que en el camino asomarán todos los colores, y también todas las tonalidades del gris. No es una ilusión de ilusa, la mía. Es un sueño de fe, de convicción profunda en que, para renacer, hay que llegar hasta el final. Es una juventud que circula por debajo de las arrugas mientras llego al final. Ilusión también por llegar contigo, para que no quede inacabado, incompleto, indeterminado, eso que sea, que todavía no sé, que tengamos que vivirnos…

Pintando Mandalas

Un día me puse a recapitular sobre el primer recuerdo del sentimiento de amor que podía rescatar al tejido memorial, así que fui tirando del hilo hasta encontrar esa primera impronta grabada en mi alma. Sucedió cuando tenía unos tres años y jugaba con otras niñas en la calle. A eso del anochecer vi asomar a mi padre por la esquina y eché a correr calle abajo a buscarle, y él me aupó en sus hombros hasta casa. En ese tramo quedó grabada para siempre la sensación de avanzar hacia el amor y sentirme aupada por la dicha, segura en los hombros del mundo.
Agradezco infinitamente a Teresa por invitarme a retomar los pinceles en este fin de semana colmado de nuevas lecturas y colores, nuevas expresiones sobre el mismo tema de siempre: El Amor. El anhelo profundo de sentirnos seguras y acompañadas en el cambio y el movimiento, en el proceso de transformación que ha de convertirnos en hombros firmes para los nuevos brotes de dicha e inocencia que surgen después de la tormenta; de sentir la alegría de una niña que corre a recibirme calle adentro, mientras asoma el amor por la esquina del lienzo.
El anhelo profundo de confiar en el otro, de que tu más íntima inocencia se sienta a salvo en sus hombros, a la vez que oyes su risa o sus lágrimas confiadas en los tuyos. El anhelo profundo de sentirnos amadas así como somos, con nuestros trazados más definidos y aquéllos más borrosos.
Un anhelo que no es sino el llamado de la dicha más honda que sostiene a la inocencia confiada en tus hombros, Amor, para que las manos de una niña tracen círculos en el lienzo del tiempo, y pinten con colores un mapa de retorno a casa que Tú dejaste grabado como una impronta en mi alma.

Taller de Mandalas con Teresa Costa ElArteDeVivirConConsciencia / Punto de Equilibrio Garraf / Barcelona

¡¡¡Gracias, niñas, por tantos colores que habéis pintado en mi corazón este fin de semana!!!

Amanece

Hacer lo posible en cada paso para que el Camino nos regale lo imposible… Así es como se ha ido manifestando la Confianza en este recorrido de Encuentros que escribieron otras páginas en el aire.

Y así, en este ciclo iniciado con la primavera, fui experimentando cada uno de los capítulos que constituyen. El hilo mágico de las palabras y la magia de las relaciones han bordado realidades en el tejido vital. El Círculo como Unidad de Conciencia ya no es un desarrollo de concepciones abstractas, sino un cúmulo de momentos vividos, compartidos junto a gentes maravillosas en cuyos corazones resonó el latido del Centro.

Finalmente los extremos se unieron en su trayectoria, y lo mágico del asunto es que sucedió en Casa Aitana, donde pude comprobar que el final del libro, narrado con la sustancia de los sueños, es una realidad concreta que escribe sus signos (con constancia, compromiso y mucho amor) en esa página vital que cada nuevo día despliega ante sus habitantes…

Los Ojos de la Noche – Extracto del Capítulo 13 – Amanece
… Quédate un rato en este sentir tan dulce y observa cómo el hilo mágico se va transformado en una vereda muy estrechita por donde se desliza tu mirada en equilibrio. El soplo de la brisa volandera te conduce a una casa. ¡Sí! Las golondrinas están haciendo sus nidos en el tejado. Te detienes un instante a la sombra de la noguera y sientes el placer sereno del agua que se desliza por los surcos, humedece, empapa, riega y transforma la superficie de la tierra. Oyes el murmullo de cantos, de faena, de cada cual en lo suyo. Pero no parece el trabajo un sacrificio o un esfuerzo, sino más bien un despliegue de energía que se expresa en acción y movimiento. Es algo así como que se ama la actividad creativa. Y se ama la armonía. El jardín está hermoso, los rosales toman los rayos del sol, exponen la intensidad de sus colores y sueltan las fragancias deliciosas. En el huerto abundan las cosechas. Allá en la cocina se amasa el pan y huele a ricas comidas. Sobre la mesa hay un jarrón con girasoles que te hacen un guiño….

En Casa Aitana // Argamasilla De Calatrava // Ciudad Real

¡¡¡ Gracias, amig@s, por mostrarme que la Casa de las Golondrinas ya existe al otro lado de mis sueños!!! 

Relaciones

No le digas al día lo que te ha contado la noche,
pues podría el sol ponerse a ensoñar…

… La intimidad de una relación auténtica, sea al nivel que sea, implica un enfoque íntegro sobre el espejo donde te miras, desnudando la comunicación de un “tener que decir, que hacer o que proyectar”. Focaliza más en ése “contigo soy” que trasciende los entresijos innatos al apego emocional, enredados muchas veces en el “¿qué tienes para mí?”. No hay decepción cuando no hay expectativas más allá de compartir lo que ya está definido en nosotros, a la vez que se potencia lo latente, lo que quiere asomar como un balbuceo y necesita ese grado de confianza para no declinarse en el intento de expresión.
La propia magia de la relación que vamos a establecer en esta lectura me exige una cercanía contigo. Me pide que llegue hasta tu corazón y para ello tengo que abrirte el mío. Por lo tanto no puedo elegir trajes que ponerme para este encuentro. ¿Me expongo entonces a la intemperie? Yo no lo veo así. El trabajo personal desarrollado en los últimos años ha concluido en la concepción profunda de no tener que protegerme de nada ni de nadie –que no sea yo misma–, así como nada puedo esconder ante los ojos del Gran Misterio. He descubierto que la inocencia no se escuda y es el mayor escudo que traemos al mundo. Facilita el espacio para establecer relaciones auténticas, de intimidad, porque si bien el día despliega los contrastes, la mirada de asombro despierta cuando descubrimos lo parecidos que somos en la noche del alma…

Introducción al libro: Los Ojos de la Noche 

En la Antigua Biblioteca de Sallen / Organiza Toteuritmia

¡¡¡Gracias, amig@s, por tantas bendiciones que trajo consigo el Re-encuentro!!!

Confianza

…Ahora ya puedes entregarle tus miedos a la araña para que ella los devore, para que tu visión pueda avanzar un paso más en las zonas oscuras del olvido. A veces unos segundos de vértigo te sacan del instante, de la pura confianza en lo imprevisible. La memoria del miedo siempre está al acecho con lo cual nunca se sienten tus pasos seguros en la red. Afianzas un pie sobre el hilo perceptible a la vez que alzas el otro hacia lo indefinido. No dudes, cielo, que el amor siempre sostiene tu corazón. Puedes exhalar el aliento contenido y acoger un nuevo impulso que conlleva un nuevo paso y un nuevo abismo por debajo de cada intento. Hasta que finalmente caminas erguida y sin miedo.
Sólo la luz del amor puede alumbrar donde no se ve nada. Así, en la medida en que crece tu recorrido, los rincones sombríos se van aclarando. El día refleja la belleza que has ido despertando a cada paso que has dado con amor. Porque muchas conexiones han sido encendidas también en cada pisada. Y tú no te paras a contemplarlas, porque ahora tu impulso es seguir caminando, seguir avanzando en esta red invisible que te sostiene. Caminas despacio haciendo malabarismos por un espacio que te pide constante confianza, pues creas el asiento para tu pisada en el mismo impulso de dar el paso. Porque nada está hecho aquí, y todo está trazado, pero es tu intento el que despierta un agujero negro o desvela un hilo dorado donde apoyas tu pie…  Extracto de Los Ojos de la Noche –  Capítulo: La Cueva de los Miedos

en CENTRO ARTEMISA // Girona

¡¡¡Gracias, amig@s, por confiar, compartir, acoger, inspirar…!!!

Los Ojos de la Noche

 

No le digas al día lo que te ha contado la noche,
pues podría el sol ponerse a ensoñar…

El reloj de la infancia se transforma en un círculo de piedras donde una mujer pasa la noche haciendo su Búsqueda de Visión, invocando la sabiduría ancestral de las Doce Ancianas. La voz de la Luna Llena se convierte en el hilo mágico que va conduciendo a la buscadora, desde la medianoche hasta el amanecer, en un viaje donde la sustancia de los sueños y el tejido de la recapitulación configuran el trenzado de luces y sombras, convertido en la claridad de un nuevo canto.

Mirar con los ojos de la noche es Recordar la mirada de la piedra, del aire, del fuego, del agua. Es abrir la visión a la unidad indisoluble del Amor que abarca un solo instante todas las miradas y todos los momentos en los cuales has amado…

Un nuevo amanecer nos aguarda en la fina luz que rompe la noche. Echemos ya a andar la mirada sobre el campo de flores nuevas que están naciendo en nuestro corazón. Llenemos cada momento de hálito renovado y sintamos lo infinito de cada instante, entregados a la paz que se siente en cada entrega…

Si deseas regalar o regalarte este libro en formato impreso, contacta con:   lamagiadelasrelaciones@gmail.com

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Girasoles al amanecer

La historia desplegada en estas páginas se desarrolla en una Comunidad del Valle Sagrado de Perú. Sus protagonistas son Buscadores de diferentes países que unen sus vidas para crecer juntos, acogiendo las costumbres y el conocimiento de una cultura ancestral. Aunque el escenario y los personajes descritos propicien la narrativa sobre los misterios de una Tradición milenaria, el desarrollo de la obra profundiza más en las relaciones a todos los niveles: con la naturaleza, con los elementos, con el trabajo, con el mundo invisible, con los compañeros de viaje; en definitiva, con uno mismo. Es la historia de una comunidad de Hombres y Mujeres Medicina que eligen el camino de la sanación, mostrando con sus vidas cómo enfrentar la existencia de una forma más sencilla, honesta y fuerte…

“Girasoles decaídos tras una larga noche de sombras oscuras, que despertaron una mañana abriendo sus pétalos a la luz del amanecer, elevaron sus corazones hacia el cielo y no necesitaron más motivo, para colmar el nuevo día, que girar en dirección al sol…”

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Somos flechas lanzadas por la vida, en cada elección marcamos nuestra proyección, nuestro destino, todas las elecciones que hice convergieron en este lugar, en este camino…

Y es cierto que elecciones muy importantes hube de hacer antes de viajar a Perú. Cualquiera podría pensar que cruzar el océano, hoy en día, no tiene nada de extraordinario: muchas personas pueden aprovechar el mes de vacaciones en conocer otros países, más o menos exóticos. En mi caso, sin embargo, fue una cuestión de conseguir más tiempo del que se requiere para hacer turismo. Desde siempre, más que la figura del turista, me interesó la del peregrino, o viajero que se busca a sí mismo en otras culturas o formas de entender la vida. Hay viajes y viajes, pero los más auténticos, pienso yo, son aquellos que nos devuelven a casa como seres diferentes y más acordes con nuestra verdadera naturaleza.

… Sin embargo, lo más extraordinario de esta experiencia es que podría haber sucedido, y puede suceder, en cualquier lugar del mundo. Lo más sorprendente es que las voces que suenan en estas páginas podrían ser, en esencia, las de cualquier persona que se baja un rato del mundo con el propósito de descubrir quién vive bajo los ropajes diseñados por su tradición, cultura o circunstancias vitales…

Proyecto Ecoaldea

… Conozco a personas que no remarcan lo que ya está definido ni andan entre la muchedumbre de caminos trazados. Me refiero a esos buscadores que se aventuran en lo incierto robándole nuevas sendas a la vida y a los que, quizá por esto mismo, no les queda más remedio que conquistar a la confianza como el más audaz de los aliados… Gentes que despertaron la consciencia de sí mismas y, al mirar el mundo con nuevos ojos, no hallaron en su entorno un reflejo con el que identificarse. En la soledad de una búsqueda incógnita enfocaron sus vidas hacia la Naturaleza, vislumbrando en la perfección de la Madre Tierra un lenguaje de conexión que les enseñó cómo forjar su existencia con la misma armonía, belleza y fuerza que desprende la Pachamama.
Corazones que empezaron a palpitar a un ritmo diferente y, desafiando cualquier tipo de estructura, apostaron por un camino que resonase con sus propios latidos. Una senda abierta a la alianza que cada relación aporta al proceso de avanzar, cultivando el entendimiento implícito en las relaciones con la naturaleza, con el trabajo, con los elementos, con el mundo invisible, con los compañeros de viaje, en definitiva, con uno mismo.
Tenaces guerreros que bordaron en su bandera el escudo del universo y cabalgaron en la confianza hacia la conquista de aquellos horizontes visualizados en sus sueños. Luchadores en una batalla contra la inconsciencia que fundieron sus pensamientos con un fuego inflamado de otras verdades. Danzantes de la vida que arquearon las cuerdas de sus gargantas afinando cantos, lanzando rezos como certeras flechas dirigidas al corazón del Gran Espíritu.
Girasoles decaídos tras una larga noche de sombras oscuras, que despertaron una mañana abriendo sus pétalos a la luz del amanecer, elevaron sus corazones hacia el cielo y no necesitaron más motivo para colmar el nuevo día que girar en dirección al sol…

Extracto del libro «Girasoles al amanecer» 

Proyecto Ecoaldea en Olocau – Valencia

¡¡¡Ánimo amig@s, que ese proyecto de vida vaya tomando forma, fuerza y realidad!!!

Doy Gracias

En este encuentro de hoy empieza un nuevo capítulo donde la palabra resurge con renovado impulso. El silencio es siempre fecundo pues genera nuevos entendimientos; quietos y mudos primero, parecieran resistirse a nacer en la conciencia, así como debajo de la nieve se va gestando la primavera que aflorará después… Todo sucede a su debido tiempo…
Y, como en todo comienzo, agradecer. Doy las gracias. Agradezco. ¿A quién? A la vida que me ha dado tanto. No sonará así tan bonito como lo cantaba Violeta Parra, mas si pongo el corazón en la palabra, por fuerza se ha de sentir la gracia, las gracias que lleva consigo el agradecimiento…

Hay procesos que culminan en abundancia, belleza, dicha, sabiduría…, y aun a sabiendas de que hoy no puedo agradecer por la consumación de tantos dones, doy las gracias por el proceso mismo de aprender, paso a paso, las lecciones que me van enseñando a sumar en la carencia, a pulir asperezas, a desvestirme de la dolencia, a leer la confianza inscrita en el no saber.
Hay fuerzas que culminan en talentos, creaciones, éxitos…, mas hoy agradezco por todas las situaciones que me dejaron sin fortaleza –que, ilusa de mí, creí en mí y no a través de mí– para que entendiese que la humildad es la más talentosa de las potencias, cuando se ha  desmoronado toda ilusión de poder… “Yo puedo” es una ilusión mental –
susurra la humildad al oido de la arrogancia- pues yo soy el resultado de todas mis relaciones.
Y, si la culminación de todas las relaciones es el amor, agradezco, doy las gracias hoy, por todas aquéllas que han configurado el amor en mí, no como idea abstracta o ilusoria, sino como experiencia, vivencia y realidad.

En Librería Albareda – Zaragoza

¡¡¡Gracias, amig@s, por acompasaros con mi canto y hacerlo vuestro!!! 

Saltos de consciencia

A lo largo de una vida pasas por etapas en las que la búsqueda y su interrogante no  hallan un espacio por donde colarse dentro de los parámetros en los que se desenvuelve tu existencia. En esos tramos no hay preguntas que hacerse porque estás comprometido en responder a las constantes exigencias que impone el cuerpo y su sustento, la mente y el desarrollo de sus facultades, o el afecto y su gama de relaciones emocionales –amor de padres, de hijos, de amantes, de amigos… amor por lo que haces–. ¿Quién tiene tiempo de indagar más allá de este marco que ya de por sí está repleto de contrastes? Casi nadie le da cabida al Interrogante a no ser que la Búsqueda misma le seduzca en algún tramo del camino. A no ser que el lienzo sobre el que pintas tus días tenga fisuras y por ahí se pierdan tus fuerzas, cayendo irremediablemente en tus abismos con un “porqué” en la garganta; o que ya nazcas con la duda incrustada en la frente y tu destino sea el de esos peregrinos de la noche oscura que caminan en dirección hacia el alba.
Sea como fuere, hay un denominador común entre las personas que somos vividas por el arquetipo de la Búsqueda: por mucha información que acumulemos, o muchos caminos que andemos, ya esté claro el día o sea noche cerrada, lo cierto es que siempre se antepone una distancia entre nosotros y los tesoros que esconde el horizonte hacia el que dirigimos nuestra mirada; no importa cuán lejos has llegado en tu viaje de conocimiento, pues lo que buscas se aleja a la misma velocidad que avanzas. Y no importa cuánto tardes en rendirte a la evidencia de que lo que la Búsqueda te está exigiendo es un salto confiado más que un paso metódico y complaciente… Pero ese salto requiere la energía que fuiste dejando a tu espalda en cada negación que no pudiste o no quisiste o no supiste transformar en un sí-mismo.
Es llegado a este punto que el buscador desanda sus pisadas y va reinventando el pasado a fuerza de sanar fisuras… Algo mágico le sucede en este recorrido, pues, al desapegarse de la búsqueda, encuentra un horizonte sobre cada paso, una claridad en cada paisaje que recordaba sombrío, una fuerza en cada herida sanada. Y es así cómo, sin darse cuenta, sin ya pretenderlo, ha dado un salto sobre sí mismo…

En el Centro María Zambrano de Granada

¡¡¡Gracias, amig@s, por participar de una nueva página en los girasoles!!!

Manifiesta tu Sol

De nuevo nos encontramos en la Montaña de Montserrat, esta vez para darle la bienvenida a NarSham que ha cruzado el océano para activar el Despertar del Ra-haraktys en España.
A pesar del  sol resplandeciente que nos regaló el día, acabamos en el recoveco más sombrío de los múltiples espacios soleados que hubieran acogido nuestro canto. Y es que nos vivimos pruebas a muchos más niveles de lo que a simple vista pudiera parecernos. El difícil acceso a la montaña que desajustó el tiempo acordado y desencadenó la impaciencia en unos y el estrés en otros. El frío en el lugar de acampada tampoco ayudó a cambiar el ánimo, pero a esas horas y después de tantos inconvenientes, preferimos, antes que desandar nuestros pasos, asentarnos en esa cueva que nos protegía del aire. Y, aunque todos acudimos al encuentro con ganas de tomar conciencia, de aprender, lo cierto es que el hambre del estómago superó al del alma.
Tengo que agradecer a NarSham que alineara el desorden energético aportando el gesto que nos acerca a la delicadeza del mundo sutil, pidiendo el permiso a los guardianes del lugar, abriendo el espacio a lo sagrado, bendiciendo los alimentos… y caldeando nuestros corazones con sus palabras.
Trato ahora de hacer una lectura de los signos, de los acontecimientos que se fueron manifestando a lo largo del encuentro. La Montaña, la Vida. Un lado soleado y el otro sombrío. Caminamos buscando el sol con la oscuridad pegada a nuestras espaldas. Así se manifiesta también la fauna y crecen las plantas. Pero a veces la vida, que es la gran maestra, nos pone delante la sombra como una larga vereda en la que no hay marcha hacia atrás. Entonces sólo nos queda girarnos hacia el sol que nos habita, esa conciencia que no depende del tiempo, ni del lugar, ni de las circunstancias, sino de una apertura total, de la confianza absoluta de que todo cuanto sucede en este momento es un pasaje más que me está mostrando quién soy por detrás de lo que creo ser. Y que es curiosamente en ese darme cuenta cuando cambia el entorno y se despliega un paisaje más soleado…

Encuentro con NarSham en Montserrat – Barcelona / Manifiesta tu sol, manifiesta tu poder en Unidad

¡¡¡Gracias, NarSham, por manifestar tu Sol en Unidad, a pesar de todo!!!

La luz del amanecer

… Conozco algunas personas que captan con nitidez lo que sucede a su alrededor y, sin más preámbulos, rechazan aquello que no les interesa. Tienen claro lo que desean para mañana, el próximo año o el resto de sus vidas, desechando de su camino cualquier interrogante que les pueda desviar de un trazado predeterminado. Conozco a otras personas que no remarcan lo que ya está definido ni andan entre la muchedumbre de caminos trazados. Me refiero a esos buscadores que se aventuran en lo incierto robando nuevas sendas a la vida y a los que, quizá por esto mismo, no les queda más remedio que conquistar a la confianza como el más audaz de los aliados. Cuando no hay trazados, la confianza se transforma en la fuerza necesaria para exponerse ante el misterio, para vivir con naturalidad al borde del abismo.
De estas últimas personas trata la historia que se abre ante ti. Gentes que despertaron la consciencia de sí mismas y, al mirar el mundo con nuevos ojos, no hallaron en su entorno un reflejo con el que identificarse. En la soledad de una búsqueda incógnita enfocaron sus vidas hacia la naturaleza, vislumbrando en la perfección de la Madre Tierra un lenguaje de conexión que les enseñó cómo forjar su existencia con la misma armonía, belleza y fuerza que desprende la Pachamama.
Corazones que empezaron a palpitar a un ritmo diferente y, desafiando cualquier tipo de estructura, apostaron por un camino que resonase con sus propios latidos. Una senda abierta a la alianza que cada relación aporta al proceso de avanzar, cultivando el entendimiento implícito en las relaciones con la naturaleza, con el trabajo, con los elementos, con el mundo invisible, con los compañeros de viaje, en definitiva, con uno mismo.
Tenaces guerreros que bordaron en su bandera el escudo del universo y cabalgaron en la confianza hacia la conquista de aquellos horizontes visualizados en sus sueños. Luchadores en una batalla contra la inconsciencia que fundieron sus pensamientos con un fuego inflamado de otras verdades. Danzantes de la vida que arquearon las cuerdas de sus gargantas afinando cantos, lanzando rezos como certeras flechas dirigidas al corazón del Gran Espíritu.
Girasoles decaídos tras una larga noche de sombras oscuras, que despertaron una mañana abriendo sus pétalos a la luz del amanecer, elevaron sus corazones hacia el cielo y no necesitaron más motivo para colmar el nuevo día que girar en dirección al sol… // Extracto del libro Girasoles al Amanecer

Girasoles al amanecer en Centro Koruma – Barcelona

¡¡¡Gracias, amig@s de Koruma, por ofrecerle a los girasoles un espacio tan ameno y creativo!!! 

Sembrando propósitos

Imaginemos entre tod@s un gran árbol con muchas ramas donde colgar todos los acontecimientos que le dieron luminosidad a nuestras vidas, pero deshojado ya de todo aquello que queremos dejar atrás… Aunque os parezca desnudo, le estamos dejando espacio a otra primavera cargada de sueños vivos… Poco a poco, a lo largo del nuevo año que se acerca, irán asomando tallos tímidos y brotarán los frutos de esos propósitos sembrados en este compartir…

De pequeños detalles está formada nuestra vida, de fragmentos de tiempo, trozos de felicidad, nostalgia, alegría, tropiezos…
Un atardecer, la belleza expresada en el arte de vivir, de ser, de un paisaje que dibuja y difumina el horizonte de nuestro camino… Compartir.
Nunca es tarde para cambiar, perdonar, sanar relaciones.
Soltar nudos y amarras…  eso nos hace libres. Nos engrandece… Cantar.
Sembremos propósitos hoy, mañana y siempre, con semillas de Amor, Voluntad y Discernimiento, la cosecha no puede ser sino Abundancia en todos los aspectos de nuestra vida.

Encuentro en la Casa de la Juventud de Alcalá la Real – Jaén

¡¡¡Gracias, amig@s por ese compartir donde Corazón y  Palabra latieron al unísono!!!

Encuentros

Hay encuentros que nos desplazan desde la limitación material de lo viviente hacia la transmutación interior que se da en la crisálida, cuyo aleteo no es sino el curso incesante de la palabra sanadora. Alquimia del verbo, transmutación de lo sensible. La alquimia como un itinerario de correspondencias, un cruce de caminos entre la materialidad del mundo y la vida del espíritu. Así es, de hecho, cuando la comunicación busca la “piedra filosofal”, la metamorfosis del alma colectiva que celebra sus bodas con la materia enaltecida.

Hay encuentros que hacen posible la construcción de un hito más en el camino de la consciencia, aun a sabiendas de que habrá desfallecimientos y que el desaliento siempre nos acecha. Confiemos, confiemos siempre, manteniendo esa actitud humilde a la vez que triunfante.

Cada cual está afinando su nota en esta Gran Sinfonía que es la vida, para que en algún momento se alcen a coro las voces, cantando: “¡Oh!, créeme, corazón, no pierdes nada. Guarda, sí, guarda para siempre lo que fue tu amor, lo que fue tu lucha…” –Sinfonía Resurrección de Gustav Mahler–.

En Centro Alquimia – Tarragona

¡¡¡Gracias amig@s del Centro Alquimia, por facilitar el amanecer de los Girasoles en Tarragona!!!

Semillas de un Sueño

Autora: Angela Castillo // Género: Narrativa

Sinopsis: Los protagonistas de esta historia hacen un recorrido por el paraíso de la ilusión, en el Camino de Santiago, para desembocar en las tinieblas del desamor, cuando interfieren las desavenencias de sus circunstancias externas…

Semillas de un sueño que sutiles manos sueltan al azar, agarrándose a suelos áridos. Diminutos brotes de una flor que asoman tímidos al corazón y son aplastados por la realidad…

“¿Y qué es el amor, ese cielo que la saeta de Cupido nos deposita en el corazón o ese infiernos en el que agonizamos cuando la flecha está envenenada por el miedo…?”

* * *

semillas de un sueñoSemillas de un Sueño es una historia de amor y desamor, un intento de expresar y entender la escala emocional inherente a toda relación amorosa. Al escribir esta obra trascendí muchos planteamientos erróneos sobre mi visión del amor: el miedo a fundirse en el otro, la falta de compromiso, las expectativas, la rutina, la soledad, el sentimiento de abandono… Trabajar en esta obra supuso un cambio de dirección en mi búsqueda, un desviar la mirada hacia dentro; o, parafraseando una de sus páginas, se podría decir que lo viví como un dejarse caer hasta el fondo, sin oponer resistencia alguna. Y allí donde se pierden las largas extremidades de la dualidad, donde no existe lo profundo o lo elevado, lo bueno o malo, lo masculino o femenino, me encontré con lo que hay, o sea, nada. Nada que perder. Nada a lo que aferrarse, todo es un juego en el que la nada se distrae soñando el universo de las cosas…
En las páginas de Semillas de un sueño hay más ingenuidad que experiencia, más sinceridad que habilidad, más desnudez que documentación y más corazón que técnica. Sin embargo, esta obra fue un solo paso, quizá más importante por ser el primero, pero un solo paso no hace un camino…

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